Un heroico guerrero-sacerdote lanza magia curativa en batalla
Una imagen de fantasía hiperrealista de Alin Durqua, un rudo guerrero-sacerdote, arrodillado sobre una rodilla en medio de un campo de batalla, lanzando un hechizo Cure Light Wounds sobre sí mismo. Su armadura de placa de mordedura de serpiente está rayada y ensangrentada, con una profunda herida en su costado donde el metal está desgarrado. Su rostro está tenso pero concentrado, con los ojos cerrados mientras canaliza la magia divina a través de su martillo de guerra, que brilla suavemente con luz azul dorado. Su mano izquierda está presionada firmemente contra la herida, y desde debajo de sus dedos, una luz tenue y radiante comienza a extenderse, reparando lentamente la carne desgarrada y el hueso agrietado. Las runas de su Martillo de Leira pulsan con energía divina, proyectando un cálido resplandor sobre su rostro magullado y su armadura ensangrentada. Su Golden Dragon Helm yace descartado a su lado, abollado pero aún reluciente. La atmósfera es temperamental y dramática: el humo se eleva desde los incendios cercanos, las tenues siluetas de los caídos yacen esparcidas a su alrededor y la ceniza se desplaza por el aire. Una brisa tira de su capa, revelando la expresión cansada pero decidida de un hombre que se niega a caer. La luz del hechizo de curación contrasta fuertemente con la penumbra, iluminando al guerrero como un faro en el caos. Sus ojos de color gris acero se abren ligeramente a medida que el hechizo hace efecto: el alivio se mezcla con el dolor, como si supiera que esta curación es solo temporal. La imagen debe sentirse íntima, arenosa y heroica, capturando el momento en que la fe se convierte en supervivencia, y un guerrero-sacerdote llama a su diosa no para la gloria, sino para levantarse y luchar de nuevo.

Peyton